Los sistemas MEMS (Sistemas Microelectromecánicos) son dispositivos que combinan componentes electrónicos con elementos mecánicos miniaturizados. Estos sistemas han experimentado un rápido crecimiento en las últimas décadas, y se utilizan en una amplia variedad de aplicaciones, desde sensores de presión y acelerómetros en automóviles hasta micromotores en dispositivos médicos y pantallas táctiles.
Los sistemas MEMS se originaron a finales de los años 60 y principios de los 70, cuando la tecnología de los semiconductores hizo posible la fabricación de componentes electrónicos en miniatura. En los años 80, se fabricaron los primeros sensores de presión y acelerómetros MEMS.
A finales de los años 90, se introdujeron al mercado los primeros micromotores MEMS y sensores de gas. En la década de 2000, la tecnología MEMS había comenzado a utilizarse en pantallas táctiles, dispositivos médicos y muchas otras aplicaciones en las industrias automotriz, aeroespacial y de defensa.
Los sistemas MEMS están hechos de materiales como el silicio, polímeros y materiales compuestos. Estos materiales se procesan utilizando técnicas de fabricación de semiconductores, como la fotolitografía y la deposición de vapor químico.
Luego, se utilizan herramientas mecánicas para cortar, grabar o perforar las estructuras mecánicas en estas películas delgadas de material. Por último, se integran componentes electrónicos en el mismo chip junto con los elementos mecánicos.
Cuando se aplica una fuerza o una señal a un sistema MEMS, los elementos mecánicos se deforman ligeramente, produciendo una señal eléctrica que puede medirse y utilizarse para controlar otros circuitos o sistemas. Por ejemplo, en un acelerómetro MEMS, cuando se detecta una fuerza de aceleración, los elementos mecánicos del dispositivo se deforman, lo que produce una señal eléctrica proporcional a la fuerza detectada.
Los sensores MEMS se utilizan en aplicaciones que exigen alta precisión, como los sistemas de navegación inercial utilizados en la navegación aérea y naval. En las últimas décadas, se han realizado avances significativos en la precisión de los sensores MEMS, permitiendo su uso en aplicaciones que antes eran impensables.
Por ejemplo, los sensores de presión MEMS se utilizan en la medición de la altitud en los teléfonos inteligentes y otros dispositivos portátiles. Los sensores de aceleración MEMS se utilizan en los sistemas de seguridad de los vehículos, como los airbags y los sistemas de control de la estabilidad. Los sensores de movimiento MEMS se utilizan en la realidad virtual, los juegos y los equipos de fitness.
Los micromotores MEMS son pequeños dispositivos que convierten la energía eléctrica en movimiento mecánico. Estos dispositivos se utilizan en una amplia variedad de aplicaciones, desde actuar como válvulas en dispositivos médicos hasta controlar espejos en los sistemas de imagen de los proyectores.
Los últimos avances en la fabricación de micromotores MEMS han llevado a la producción de motores más potentes y eficientes. Esto ha permitido utilizarlos en aplicaciones de alta exigencia, como los sistemas de enfoque automático en cámaras de alta resolución y en los equipos de producción microelectrónica.
Las células solares MEMS son dispositivos que convierten la energía solar en energía eléctrica utilizando tecnología MEMS. Estas células solares tienen una eficiencia energética similar o mejor que las células solares convencionales, pero a un costo más bajo y con una mayor flexibilidad en su diseño.
Estas células solares se han utilizado en aplicaciones como la alimentación de sensores ambientales en entornos remotos, los sistemas de seguimiento solar para la energía solar y los sistemas de alumbrado público. Una de las ventajas de las células solares MEMS es su capacidad para trabajar en entornos hostiles, como los lugares con alta radiación y temperaturas extremas.
Los sistemas MEMS han evolucionado en las últimas décadas, y ahora se utilizan en una amplia variedad de aplicaciones. Los últimos avances en la precisión de los sensores MEMS, la eficiencia energética de los micromotores MEMS y la flexibilidad en el diseño de las células solares MEMS han llevado a soluciones más eficientes y de menor costo para muchas aplicaciones.
A medida que la industria de la microelectrónica continúa desarrollando nuevas tecnologías y procesos, se espera que los sistemas MEMS sigan desempeñando un papel fundamental en el diseño de dispositivos electrónicos cada vez más pequeños y eficientes.